​Nayra Petrini

Un poquito de mi...

 

 

Nací hace tres décadas en la isla de Gran Canaria, España. Fabricada con una mezcla de genes canarios, italianos y alemanes, siempre he sido de mente y cuerpo inquietos y desde muy pequeñita, gracias a los empujones de mi madre, empecé a bailar.

 

Así viví mi adolescencia, entre bambalinas y clases en la Escuela de Natalia Medina. Fue en esta época cuando también me inicié en el mundo de la coreografía, consiguiendo ganar con sólo 18 años el 1º premio en el 2MASDANZA (Festival de Danza Contemporánea de Canarias). Esto me abrió las puertas para poder coreografiar varias óperas y musicales, además de creaciones propias con difusión en las islas y resto de España.

 

Al llegar a la veintena decidí dar el salto y mudarme a Madrid, para seguir creciendo y creando. Llegué con muchas ganas, miedos y mi carrera de enfermería terminada. Aquí he continuado mi formación en escuelas de renombre como Carmen Senra, Karen Taft, Spazio Danza, Madrid Dance Center; a la vez que continuaba ejerciendo como profesora de danza, actividad que inicié unos años antes de la mano de Natalia Medina.

 

Y de repente, con un cuarto de siglo cumplido, tuve la inmensa fortuna de entrar a formar parte del elenco del musical "Cabaret" (Stage) con el que estuve girando por toda España durante 2 años, y al que le debo tanto y tanta felicidad. Fue a partir de este momento en el que decidí abrir miras a la interpretación y al canto, materias en las que continúo formándome hasta ahora.

 

Al llegar a la treintena, amplié los campos de acción y junto con las áreas artísticas, también me he formado en producción y dirección, estando titulada en Regiduría Escénica y de Espectáculos.

 

Paralelamente he seguido muy en contacto con mi carrera sanitaria, sacándome los títulos de quiromasajista, masajista deportivo, reflexóloga, naturópata… y actualmente, ya con 40 años cumplidos, trabajo en producciones audiovisuales (cine, tv, publicidad), como asesora técnica, coach, baby wrangler, figuraciones especiales y enfermera asistencial.

 

Y aquí sigo, sonriéndole al Universo,  con el corazón lleno de gratitud hacia esas personas que me han enseñado tanto y a las oportunidades y circunstancias que me ponen a prueba día tras día para aprender a crecer y seguir adelante con mi vocación, mis sueños, mi vida. GRACIAS!